Tras unas negociaciones largas y dolorosas, Reino Unido y la Unión Europea firmaron el domingo el acuerdo de divorcio que pondrá fin a más de 45 años de un matrimonio de conveniencia donde las cuestiones económicas siempre se impusieron al proyecto político. "Desde 1973, siempre fue una relación utilitaria con una insistencia principal en la dimensión económica", subrayaba poco antes del referendo sobre el Brexit Pauline Schnapper, profesor de civilización contemporánea británica en la universidad de la Sorbona, en París. "La dimensión sentimental es casi inexistente". reseñó AFP. |